¿Qué hacer para curar el mal de ojo?

El mal de ojo, más allá de las consideraciones psicológicas que haya, es uno de los principales problemas con los que te encuentras. ¿Quieres saber cómo curarlo? Sigue leyendo.
Las principales maneras de curar el mal de ojo
El mal de ojo es el maleficio más conocido popularmente en diversas culturas y a lo largo de los siglos, puesto que ya hay documentación en la Antigua Grecia. Lo que subyace es que una persona, con el poder del pensamiento, le ha deseado un mal a otra que se ha cumplido. Aunque en muchos casos ese mal puede responder a la sugestión o a la mala ejecutoria de la persona afectada, pero también es verdad que existen personas con poder para el mal.
La realidad es que la ciencia no es capaz de explicar por qué algunas personas tienen una fuerza sobrenatural. Y por esa razón, podemos decir que el mal de ojo existe. Ahora bien, la buena noticia es que, igual que la maldad se retrotrae a la Antigüedad, también los remedios están documentados desde esa época en diversos pueblos.
Por lo tanto, y sea cual sea el motivo, sí que hay algunas formas para evitar que las malas intenciones de los demás te afecten. Según el caso, podrás aplicarlas tú misma o pedir a una tercera persona que te ayude. Las más importantes son las siguientes:
Mano de Fátima
La Mano de Fátima es uno de los amuletos de protección más utilizados para repeler las energías negativas. Este amuleto apareció en el siglo IX A.C. en poblaciones semitas y, posteriormente, ha sido adoptado por otras culturas. Además de para eliminar las energías negativas, también es un buen protector frente al temido mal de ojo. Existen varios diseños, dependiendo de la cultura o de quien lo elabore, pero la funcionalidad básica es la misma.
Uso de ojos de cristal
Los ojos de cristal son otro de los clásicos para absorber energías negativas en general, y los llevan las personas o se colocan en la entrada de las casas; por lo tanto, también podría servir para la temática que tratamos. Una variante específica para combatir las envidias y muy conocida es el ojo de Horus egipcio. Las posibilidades que hay son diversas y, dependiendo de si la protección es individual o colectiva, podrás optar por un modelo u otro. Vale la pena, pues, que te plantees esta opción de uso cotidiano.
Limpieza del aura
Los malos pensamientos de otras personas hacia nosotros pueden afectar nuestra aura, o campo energético. Y quien conozca bien estas energías puede captar claramente dónde están los problemas o si el aura está cargada. Quizás en este caso tengas que pedir que te ayude una tercera persona, pero la limpieza de aura es una buena forma de reequilibrarte y de eliminar malas energías externas. Para esto, lo conveniente es que reconozcas tu campo akásico para poder limpiarlo en todas sus zonas.
Huevos
Los huevos como aspersor de las malas energías son otra de las formas de eliminar este tipo de hechizos. En este caso, lo que hay que hacer es pasar el huevo por todo el cuerpo. De esta manera, cuando lo abras, podrás ver si había malas energías o no (esto sucede si la yema queda negra). Posteriormente, puedes disolver la clara y la yema con agua y deshacerte de ella. Este es otro de los métodos cuyo origen se retrotrae a la Antigüedad. Esto hace que resulte fácil localizar la mala energía y, sobre todo, desecharla.
Sal
La sal es otro de los elementos útiles para eliminar las malas energías, y existen varias formas de usarla. Por un lado, puedes coger un puñado, apretarlo, y pensar en la persona que te manda el mal de ojo para que toda esa energía quede ahí. La segunda posibilidad es emplear una pequeña bolsa que llevarás contigo como protección. Otra opción interesante es la de poner un vaso de agua con sal si estás de cara al público o en el salón de tu casa. Eso sí, lo que te aconsejamos es que te decantes por la sal gorda, mucho más efectiva.
Poner una burbuja de protección
Las burbujas de protección son un recurso que pueden emplear aquellas personas que estén acostumbradas a funcionar con su energía mental. En este caso, lo que tendrás que hacer es concentrarte e imaginarte dentro de una burbuja energética. Esto servirá, en consecuencia, para evitar que las energías o pensamientos negativos penetren en ti. Si tienes un conocimiento previo sobre este mundo, será un recurso interesante porque funciona y no se necesitan grandes habilidades, más allá de la capacidad de concentración.
Conclusión
Curar el mal de ojo es posible con múltiples métodos, aunque algunos serán más efectivos o menos dependiendo de tus características y, además, de la potencia que tiene el hechizo. En Infobrujas contamos con un equipo de especialistas que te podrán decir si tienes o no ese problema. ¡Contáctanos!